Instituto Casla: torturas físicas y psicológicas en detenidos postelectorales generan ola de suicidios

Desde la Redacción Hasta que caiga la Tiranía.-

Las torturas físicas y psicológicas masivas hacia los más de dos mil detenidos tras las protestas poselectorales de 2024, en especial, los recluidos en las cárceles de Tocorón y Tocuyito, provocaron una ola de intentos de suicidio en estos centros de reclusión. Es terrorismo de Estado, es lo que se centra el último informe del Instituto Casla presentado este jueves 15 de mayo en la sede de la Organización de Estados Americanos.

Acompañada por el secretario general de la OEA, Luis Almagro, la directora ejecutiva del Instituto Casla, Tamara Suju, expuso algunas de las atroces torturas que sufrieron los ciudadanos arrestados los días posteriores al 28 de julio. Detalló de como el régimen de Nicolás Maduro se ha convertido en un sistema represivo que sa la violencia como instrumento de dominación política.

Las cárceles de Tocuyito y Tocorón, fueron remodeladas para albergar a los detenidos en protestas, quienes recibieron torturas físicas y psicológicas masivas, comparables con los campos de concentración nazi; víctimas de golpizas, descargas eléctricas en las partes íntimas, noches de total oscuridad en las que les privaban el sueño y constantes amenazas, uso de ansiolíticos de forma masiva para controlarlos, y hasta castigos de llevarlos a patios de cemento a pleno sol para que sufrieran quemaduras en la piel, son apenas extractos de este Informe Anual 2024-2025 sobre Crímenes de Lesa Humanidad en Venezuela, elaborado por un panel de expertos del Instituto Casla.

Suju dijo que las torturas psicológicas eran dirigidas a destruir su autoestima y dignidad; les negaron medios de vida como comida e hidratación, expuestos de forma prolongada a condiciones insalubres sin acceso al aseo personal y baños, discriminación y tratos crueles a la comunidad LGBT, entre otros.

”Inducción al suicidio”

“El Instituto Casla quiere denunciar al Estado Venezolano por inducción al suicidio, ejecutada como parte del terrorismo de Estado contra los detenidos en Tocorón y Tocuyito. Las terribles condiciones carcelarias y los abusos constantes, el sometimiento a torturas verbales, físicas y psicológicas, la pérdida de esperanza de salir de la cárcel, el hambre, la deshidratación, el sentirse sucio, las dolencias físicas, la falta de atención médica, la incomunicación con familiares, los cuadros severos de depresión y miedo provocaron una ola de intentos suicidios nunca antes documentada en nuestro trabajo”, destacó la activista de los DDHH.

De acuerdo a los testimonios, entre ocho intentos de suicidios por días llegaron a darse durante los primeros tres meses de los detenidos en protestas en Tocorón. A esto se le suma que el pasado 4 de mayo el joven Lindomar Amaro se quitó la vida en esa misma prisión, mientras que su compañero de celda Joandri Silva también lo intentó. Ambos habían pasado 15 días en una celda de castigo.

Existen casos de excarcelaciones, pero igual las víctimas es tal el deterioro físico y psicológico que aún temen por sus vidas. Y la activista citó lo ocurrido con Ariana Pinto, expresa política de 20 años de edad, hipertensa y diabética, que fue liberada luego de haberse deteriorado su salud por la falta de atención médica oportuna”, reforzó la abogada.

El régimen de Nicolás Maduro es una tiranía estructurada que opera como una red criminal transnacional, donde las instituciones del Estado han sido capturadas y están al servicio de la represión, el control social y actividades ilícitas.

“No estamos ante un simple régimen autoritario ni ante un Estado fallido. El sistema venezolano ha integrado la estructura estatal con redes criminales que hacen de la represión, la impunidad y la permanencia en el poder sus únicos objetivos”, sentenció.

En este contexto, los crímenes de lesa humanidad no son hechos aislados, son estrategias planificadas por una cúpula político-militar que incluye órganos judiciales, de inteligencia, policiales y militares. “Los poderes del Estado están implicados en la planificación, ejecución y omisión de estos crímenes. Es un aparato diseñado para perseguir a civiles y militares, dentro y fuera del país”, alertó Sujú.

Toda una estructura represiva se orquestó para contrarrestar las protestas pacíficas contra el “fraude electoral”: “el régimen de Maduro planificó y preparó a toda su estructura represiva: operaciones de inteligencia, redes de informantes, desapariciones forzadas y tortura sistemática. No fue casualidad. Fue una orden directa para aterrorizar a la población ante un resultado electoral adverso. La orden era salir a reprimir con todo el uso de la fuerza, sin mirar a quien, utilizando el secuestro, la desaparición forzada, la tortura masiva contra cientos de detenidos en las prisiones de máxima seguridad. Así como la operación tun tun, para causar el terror suficiente en la población y aplacar las protestas”.

Y lo más grave, se destinaron a jóvenes de entre los 18 y 25 años de edad, que están haciendo sus pasantías en cuerpos policiales o en el Ministerio de Asuntos Penitenciario, para que se hagan cargo de las torturas en contra de los detenidos en el contexto poselectoral. “Muchos de los custodios son estos jóvenes. Jóvenes aprendiendo a torturar y maltratar a otros jóvenes. Algunos han sido detenidos por negarse a hacerlo”, sugirió la activista.

Entre las acciones más escabrosas narradas en el informe del Instituto Casla está el hallazgo de más de 532 detenidos, cuya identidad se desconoce, presos en los sótanos de la Dirección de Contrainteligencia Milira en Boleíta. Familiares tendrían prohibido hablar de ellos o de lo contrario corren el riesgo de ser detenidos.

Testimonios, pruebas documentales y patrones de represión sistemática, respaldan esta investigación que será elevada a instancias internacionales como la Corte Penal Internacional (CPI), donde ya se adelanta una investigación formal contra altos funcionarios madurista por la presunta comisión de crímenes de lesa humanidad.

Suju instó a la CPI y a la comunidad internacional tomar acciones contundentes en contra de la dictadura de Maduro, incluyendo órdenes de aprehensión en contra de la cadena de mando, vaticinando que la situación de Venezuela podría escalar a un conflicto regional.

Con información El Nacional

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Publicación : 15/05/2025 16:08 PM