Madre de dirigente de Vente Venezuela detenida, denuncia que le niegan su paradero

Desde la Redacción Hasta que caiga la Tiranía

La criminalidad de un régimen arrecia sin piedad. Flor Oropeza, madre de la coordinadora de Vente Venezuela en Portuguesa, denuncia que ha recorrido todos los centros de reclusión y le niegan información; desconoce paradero de su hija, que fue violentamente sacada de su apartamento por una comisión de la Policía Bolivariana al mando de la comisario Deisy Zambrano.

En un conmovedor video, la señora Oropeza denuncia la detención arbitraria y desaparición forzada de su hija, María Oropeza, jefe del Comando de Campaña ConVzla en Portuguesa.

Han 48 horas de su público, notorio y comunicacional secuestro por parte de funcionarios Policiales y de Inteligencia de la DGCIM del Régimen; abunda por las redes sociales repudio hacia esta acción, en que el régimen usa a otra mujer para arremeter a otra mujer: violencia de género, el uso de la figura femenina, como muy bien lo ejemplifica el Observatorio Nacional de Violencia.

Los funcionarios, sin presentar orden de allanamiento ni de captura se llevaron a la joven dirigente, “violando todos los principios de legalidad y con todo el abuso de poder”, reporta la ong Rescate de Valores en X.

“Desconozco su paradero. Exigimos fe de vida y conocer ¿Dónde está, mi hija?, pido le sean respetados sus DDHH”, dijo la madre toda angustiada.

Las detenciones forzadas también constituyen “crímenes de lesa humanidad”.

De acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas, se considera “crimen de lesa humanidad, delito de lesa humanidad o crimen contra la humanidad cualquiera de las atrocidades y delitos de carácter inhumano, que forman parte de un ataque generalizado o sistemático contra una población civil, cometido para aplicar las políticas de un Estado o una organización.

Los crímenes de lesa humanidad son una de las cuatro clases de crímenes que la Organización de las Naciones Unidas considera de mayor trascendencia para la comunidad internacional, junto al crimen de genocidio, los crímenes de guerra y el crimen de agresión. Estos conceptos comenzaron a ser definidos en el marco de las Naciones Unidas, al finalizar la Segunda Guerra Mundial, ante la preocupación generada por los genocidios que «en todos los períodos de la historia ha infligido grandes pérdidas a la humanidad”.

Una cruel realidad que se vive en las calles y traspasa las paredes de los hogares venezolanos, donde además existe una ola de angustia y temor de expresión, una secuela terrible de los acosos sistemáticos. Un daño que reclama atención de la comunidad internacional, los ciudadanos venezolanos claman justicia.

Lo que escribió María Oropeza en sus redes, es el sentimiento que aguarda en muchos jóvenes y ciudadanos venezolanos: había pedido la intervención extranjera; pedía ayuda, muy válido, no es un ningún delito, en relación con la criminalidad de quienes usurpan el poder en Venezuela.

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Publicación : 08/08/2024 12:05 PM