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Falso: ¿Sanciones de EEUU ocasionaron la escasez de insulina en Venezuela?

Falso: ¿Sanciones de EEUU ocasionaron la escasez de insulina en Venezuela?

Falso: ¿Sanciones de EEUU ocasionaron la escasez de insulina en Venezuela?

Falso: ¿Sanciones de EEUU ocasionaron la escasez de insulina en Venezuela?


Desde la Redacción Hasta que caiga la Tiranía-

El régimen madurista no cesa en sus “mentiras frescas”, como se dice en el argot popular cuando las falsedades son tan evidentes y no se las cree ni quienes las fabrican, que caen en el absurdo. Es el caso de las vallas publicitarias en Caracas que culpan a las sanciones y la oposición por la escasez de medicinas en 2017 son falsas, según Cazadores de Fakes News. “La escasez de medicinas está documentada desde 2012”, recalcan en su página web este grupo periodístico de gran reputación.

Y refieren Cazadores de Fake News que La valla que atribuye la escasez de insulina a las sanciones de Estados Unidos forma parte de una estrategia más amplia del régimen venezolano; para desviar la atención de su propia gestión ante la crisis humanitaria compleja que generaron con sus desidias.

“Conectar la escasez a sanciones específicas de 2017 no solo distorsiona la realidad, sino que omite años de crisis previa”, argumentan.

También, demuestran en línea, por la cuenta en la red social X, que la escasez de medicina se inició por el año 2012, cinco años antes de las sanciones, mientras ponen al descubierto cómo representantes del chavismo intentaron restar importancia a esta problemática.

A través de evidencia forense digital, Cazadores de FakeNews pudo rastrear indicios claros de la crisis de medicamentos en Venezuela en el año 2012, mucho antes de las sanciones de “junio de 2017” mencionadas por la campaña de vallas en Caracas de las cuales tampoco hay evidencia.



(La referencia más antigua rastreada durante la investigación data de 2012, cuando medios de comunicación reportaron la escasez de medicamentos en el país)



Citan en la investigación el artículo “Venezuela enfrenta escasez de medicinas” de El Nuevo Herald del 6 de junio de 2012, el cual registra la situación de abastecimiento de medicinas en Venezuela, que además develó la dependencia creciente de importaciones a causas de políticas económicas que desalentaron la inversión privada y complicó la adquisición de medicinas vitales.

“Venezuela atraviesa una crisis debido a la falta de medicamentos y las medidas tomadas por el gobierno para superarla han sido desacertadas”, informó para esa fecha Rafael Fumero, presidente de la Asociación Farmacéutica del Este.

También, la Federación Médica de Venezuela estimó que el déficit de insumos en los hospitales alcanzaba 95%, mientras la ministra de salud de entonces, Luisana Melo, mentía y decía que apenas alcanzaba el 15 por ciento. La situación deficitaria no ha cambiado, se mantiene igual de crítica.

La desfachatez alcanzó su límite, cuando un artículo de Analítica en junio de 2016, plasmó declaraciones de la ministra Melo, durante una audiencia de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, en que insistía en que el régimen "garantizaba el suministro de medicamentos y que el problema radicaba en la manera en que éstos se estaban consumiendo".



Para rematar, otra falsedad de cómo las autoridades intentaron esconder la magnitud de la crisis antes de cualquier sanción internacional es una entrevista que diera en Chile William Castillo, para entonces miembro del Estado mayor Comunicacional venezolano y director general de CONATEL, como parte de la campaña “La Verdad de Venezuela” que desplegó el régimen venezolano en el ámbito internacional.

En esa entrevista, Castillo se dedicó a desmentir la crisis humanitaria compleja que se había denunciado en Venezuela y calificar los problemas de abastecimiento de alimentos y medicina como “problemas puntuales”.

La llegada de las sanciones

Recuerdan que es en noviembre de 2017, cuando el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, a través de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), anunció sanciones contra diez funcionarios venezolanos, por acciones en detrimento de los procesos democráticos e incentivas a la corrupción en Venezuela.

Sanciones que derivaron en irregularidades en las elecciones estatales del 15 de octubre de 2017 y otras acciones como la censura y la manipulación de medios estatales.

Los funcionarios sancionados fueron: Sandra Oblitas Ruzza, Socorro Elizabeth Hernández De Hernández, Carlos Enrique Quintero Cuevas, Elvis Eduardo Hidrobo Amoroso (excontralor y ahora presidente del CNE), Julián Isaías Rodríguez Díaz, Ernesto Emilio Villegas Poljak, Jorge Elieser Márquez Monsalve, Manuel Ángel Fernández Meléndez, Carlos Alberto Osorio Zambrano, y Freddy Alirio Bernal Rosales. Todos ellos enfrentaron la congelación de sus activos en EE. UU. y se prohibió a los ciudadanos estadounidenses realizar transacciones con ellos.

Para ese entonces, Steven T. Mnuchin, secretario del Tesoro de EEUU, advertía: “mientras el gobierno venezolano continúe ignorando la voluntad de su pueblo, nuestro mensaje sigue siendo claro: Estados Unidos no se quedará al margen mientras el régimen de Maduro continúa destruyendo el orden democrático y la prosperidad en Venezuela”, recuerda la investigación periodística.

De esta manera, Cazadores de FakeNews expone que la valla que atribuye la escasez de insulina a las sanciones de Estados Unidos forma parte de una estrategia más amplia de la dictadura venezolana, que busca desviar la atención de su propia gestión ante la crisis humanitaria compleja; “desde la crisis económica hasta la escasez de alimentos y medicinas, incluyendo el impacto en la industria petrolera, la narrativa oficial ha sido consistentemente culpar a las sanciones internacionales”.

Es la misma narrativa que ha mantenido estos años, la revolución chavista que cada día cae en su propia trampa, que ni siquiera quienes lo seguían creen en la “prometida abolición de clases” y la utopía del socialismo del siglo XXI mas bien ha incrementado la pobreza y la brecha social más extendida.